Es el primer caso en Arequipa, y el tercero a nivel nacional, en que una persona asesina en"legítima defensa". El administrador Eloy Tamayo Maruyama (32) acabó con la vida de José Nizama, alias "Macano", quien junto a otros cómplices intentó asaltarlo la noche del jueves. Ayer, valiéndose de esa figura legal, fue liberado de la detención preliminar que afrontaba. Ahora afrontará las investigaciones en calidad de citado.
"Hay dos precedentes en Lima que reforzarán la tesis (de la defensa propia) porque marcan jurisprudencia", explica el penalista Mauro Pari Taboada.
Los tres aspectos que deben cumplirse para darse la figura son: 1) falta de provocación, es decir que Tamayo no haya iniciado el incidente, 2) la agresión ilegítima, que el administrador haya sido atacado y no el atacante y 3) la racionalidad del medio, que la defensa ejercida haya sido proporcional al ataque.
Esos criterios se tendrán que evidenciar en la investigación preliminar que realiza el fiscal Antonio Chacón, de la Primera Fiscalía Penal.
A decir de Pari, la última de las características necesarias es complicada de medir, por lo que las indagaciones pueden durar hasta cuatro meses con una ampliación de dos meses más. "Hay que analizar las circunstancias, tiempo, lugar y modo", detalla.
CAMINOS POSIBLES
Según el letrado, solo existen dos panoramas posibles para el ahora investigado por asesinato. El primero es que el caso se archive a nivel de la Fiscalía, luego de comprobarse la legítima defensa. El otro es que se le abra un proceso penal por "legítima defensa excesiva".
Esta última se configuraría si el fiscal determina que el asesinato del facineroso fue una medida innecesaria. Luego se elevaría el caso al Poder Judicial, donde el proceso podría demorar hasta un año.
"Pese a ello, solo sería condenado a menos de la pena mínima por asesinato, es decir por debajo de los seis años", revela Pari Taboada. La pena máxima es de 20 años.
Ivan Flores Andrade